Una alta ejecutiva con corazón de hielo trata con mano dura a todos sus empleados, en especial a un chico que sólo vive para ella. Un buen día recibe la noticia de que será deportada a Canadá, su país de origen, al caducar su visado. Pero con tal de conseguir la nacionalidad estadounidense obliga a su asistente a casarse con ella. Pero todo tiene que hacerse deprisa, porque el tiempo apremia, aunque el agente de inmigración que estudiará si la boda es sincera o un fraude no les pondrá las cosas fáciles… pero no contaré más al respecto.
\\\REFLEXIONES///
Se trata de una comedia romántica típica, en la que dos personas bien distintas que se llevan a matar y no se soportan son obligadas de un día para otro a llevarse bien, a aparentar que se quieren y a llevar adelante el plan o de lo contrario pueden dar al traste con las aspiraciones profesionales de ambos. Como es lógico esta situación genera un montón de situaciones bastante simpáticas y divertidas que nos amenizarán la hora y media larga que dura la peli.
Desde el primer momento se hace amena de ver. No nos encontramos ante una historia original y brillante, ya que es una peli más de este tipo, predecible y con sus tópicos, pero resulta bonita, simpática y tierna. Las situaciones son de lo más variopintas, y hay tanto disparatadas como emotivas, para que todos quedemos contentos.
El desarrollo de acontecimientos no está mal, aunque en ciertos momentos se vuelve un poco pausada, pero afortunadamente apenas se nota. Tampoco es la peli alocada en la que todo se vuelve caótico y no sabemos por dónde nos va a salir. Es divertida pero elegante, sin demasiadas locuras ni disparates.
Los protagonistas lo hacen bien. El chico que interpreta al novio se muestra creíble en sus dos facetas: la de subordinado temeroso de la ira de su jefa y de chico sin complejos, con las ideas claras y seguro de sí mismo, que se nos presenta cuando van a visitar a su familia. No es que sea una interpretación sublime, pero no está nada mal y cae bien, que ya es bastante.
La palma se la lleva, como no podía ser menos, Sandra Bullock, que es la protagonista absoluta de la cinta. Lo hace bastante bien, y desde luego su faceta más romántica es mucho más creíble y adecuada que la de bruja malvada que tiene a sus empleados temiendo su ira, que para mí resulta un tanto forzada. De paso aprovecha para lucir tipito, pero la verdad es que me gusta su actuación. Sabe llevar las riendas de la historia hasta en los momentos en los que hace de pez fuera del agua, lo que habla bien a su favor.
Los diálogos no son excesivamente elaborados. Hay ciertas conversaciones con algo de peso, pero por lo general son bastante típicos y no ofrecen elementos con los que reflexionar ni durante ni después de haber visto la peli. Eso sí, no hay tacos ni expresiones subidas de tono a pesar de que hay bastantes situaciones que podrían contenerlas, lo que la hace recomendable para ver en familia sin problemas.
Uno de los aspectos más llamativos de la peli son las localizaciones. Nos encontramos en una isla de Alaska, en la que veremos bellos paisajes, bosques, el mar y un pueblecito de lo más sencillo y atractivo, tranquilo pero con gente que apetece conocer, y que dan ganas de acercarse por allí, jeje. Hay muchas escenas de exteriores que sirven para alegrarnos la vista y que disfrutemos un poco más de la peli, lo que se agradece.
\\\CONCLUSIONES///
Se trata de una peli bonita, que a pesar de tener un argumento poco original y bastante predecible resulta entretenida y muy agradable de ver. Nos encontramos momentos graciosos que no generarán carcajadas probablemente, pero sí una sonrisa, y desde luego no se hace aburrida ni un solo instante.
A mí, sinceramente, me gustó mucho. Sabía más o menos lo que me iba a encontrar y no me ha defraudado, por lo que no tengo quejas de ella, ya que cumple perfectamente con su cometido, que no es otro que hacernos pasar un rato ameno y tranquilo.
Así pues, muy recomendable.