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martes, 26 de octubre de 2010

10 000 A.C.: Los primeros pobladores

Hablaré ahora de una película llamada “10.000 A.C.”, dirigida por el conocido Roland Emmerich.

La historia que se nos cuenta acontece alrededor del diez mil antes de Cristo, en una Tierra en la que los humanos aún son pocos y no saben mucho más aparte de cazar, creer en dioses y profecías y hacer fuego. En una zona fría y montañosa, una tribu vive gracias a la caza de mamuts, pero como con el paso de los años el número de estos animales ha ido en descenso, esa tarea se va convirtiendo en una empresa cada vez más difícil y el hambre va haciendo mella en ellos. 

Pero todos esperan que se cumpla una profecía: aquel que se una a la niña de los ojos verdes será el elegido para poner fin a esa etapa oscura en sus vidas. Y el elegido resulta ser D’Leh, quien está enamorado de Evolet desde pequeño, y con quien pretende vivir el resto de su vida. Pero los diablos de cuatro patas atacan la aldea y raptan a un buen número de sus habitantes, entre los que se encuentra Evolet, lo que hará que D’Leh emprenda un peligroso y largo viaje por tierras desconocidas, montañas, desiertos, selvas y ríos, con el objetivo de rescatar a sus amigos y volver a estar junto a su amada. Y hasta aquí os cuento para no desvelar nada importante. 


La historia en un principio promete: una película sobre una civilización primitiva llama mucho la atención. Pero conforme la peli va avanzando nos vamos dando cuenta que no es lo que habíamos esperado. El argumento no es para nada original (tipos malos que raptan a la chica protagonista, y noviete guaperas que se lleva el resto de la peli intentando salvarla; la verdad es que está ya bastante explotado). Por otra parte, los hechos que se suceden no dan la emoción, el suspense y la intriga que podrían imprimir, por lo que aunque estemos ante una de las escenas con más acción y peligros no vamos a estar atentos y expectantes, sino igual que en cualquier otro momento de la cinta. Y esto a mi parecer es bastante significativo.

Los diálogos no es que estén muy conseguidos. De hecho son bastante sosos y carentes de cualquier atractivo. Casi lo mismo se puede decir de los protagonistas, que aunque no lo hacen del todo mal lo cierto es que si hubieran sido otros cualesquiera el resultado podría haber sido el mismo o incluso mejor.

Y por si fuera poco, el rigor histórico brilla por su ausencia: mamuts, tigres dientes de sable, bichos fantásticos que se asemejan a dinosaurios, pirámides y barcos veleros todos juntos y revueltos la hacen cuanto menos poco creíble, y aunque visualmente queda bien por lo demás no deja demasiado buen sabor de boca.

Los únicos aspectos que destacan de la película son los interesantes efectos especiales, muy realistas y bien hechos, y las magníficas localizaciones que en ella aparecen: las zonas montañosas, el desierto, la selva y demás hacen que pasemos un rato agradable viendo parajes preciosos y que ello nos lleve a puntuar la película por encima de lo que se debería.

Por último, sólo me queda comentar que ni las escenas de acción son tan espectaculares ni tan numerosas como para que nos pasemos toda la película atentos a la pantalla. Más bien están en el límite entre el entretenimiento y aburrimiento.

Y la verdad es que es una auténtica pena, porque podía haberse obtenido un resultado muchísimo mejor partiendo de la misma base, y teniendo a un director que tiene fama de hacer buenos trabajos.

Así pues, sólo la recomiendo si no tenemos otra peli mejor en nuestras manos.

Aquí tenéis el tráiler:

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