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martes, 13 de octubre de 2009

Más que terror, da pena



Os voy a hablar ahora de una película que sin mucha dificultad puedo describir como una de las más malas que he visto en mucho tiempo: “The Morgue”. Así que esta opi, aparte de hablar de la peli y contar de qué trata, espero que sirva como advertencia para que optéis por ver cualquier otra antes que ésta. Por vuestra salud mental, más que nada, jaja.

La historia que se nos cuenta acontece en una morgue una noche cualquiera. Nuestra protagonista, una limpiadora del edificio, se lleva una sorpresa cuando en el lugar aparecen una serie de personas desconocidas: un matrimonio con su hija pequeña que se han quedado tirados en la carretera, y un par de chicos que han sufrido un accidente. Poco cuentan de sus respectivas vidas, pero todos tienen una cosa en común: necesitan ayuda. Aparte de ellos, nos encontramos con el vigilante de seguridad de la institución, un hombre apagado que ya no es lo que era a causa de un drama familiar.

Así las cosas, las horas van pasando en espera de ayuda, pero lo peor está por llegar: alguien que se oculta en el edificio comienza a asesinarlos, y no tendrán más opción que escapar de allí o luchar contrá él si quieren llegar vivos a la mañana siguiente. Y, dado que sobre aquel lugar recae una extraña leyenda sobre un suicidio, las conjeturas pronto comenzarán a ponerse sobre la mesa.

Aunque la historia puede parecer interesante, lo cierto es que no lo es para nada. La película empieza con una frase muy conocida de Sir Arthur Conan Doyle y parece que promete, pero cinco minutos después ya queda claro que la película no estará a la altura de ninguna otra que hayamos visto antes. Y es que el guión es muy pobre, los diálogos son sencillamente penosos y los acontecimientos que se van sucediendo parecen sacados más de una parodia que de una película seria.

Pero ahí no acaba la cosa: a lo largo de la peli asistimos a una variopinta serie de hechos con una lógica bastante discutible. Los personajes se mueven, piensan y hacen cosas que no tienen ni pies ni cabeza, y desde luego dudo mucho que alguien las hiciera. Y es que, por poner algún ejemplo, es un tanto estúpido que la protagonista les diga al matrimonio que esperen al guardia de seguridad para que éste les ayude con el coche mientras ella se marcha y sigue con sus cosas y a los cinco minutos, cuando el tío no les hace ni caso, vuelva y les cuente que él sólo habla con ella. ¿Y entonces, digo yo, para qué arma tanto lío? O cuando en un momento dado entran en una habitación huyendo del malo y a los dos segundos vuelven a salir por ella como si nada… como si al otro lado nunca hubiera habido nadie persiguiéndoles.

En cuanto al desarrollo de los acontecimientos se hace de forma bastante más lenta de lo adecuando, por lo que a pesar de que sólo dura una hora y veinte se hace eterna, en especial cuando vamos acumulando despropósitos en su haber y nos vamos dando cuenta de que la cosa no puede mejorar. Es más, hacia la mitad de la peli ya nos hacemos una idea bastante acertada: por mucho que mejore desde entonces hasta el final, la peli seguirá siendo muy mala. Así que ya podéis haceros una idea de ella, jaja.

Con respecto a interpretaciones, están muy por debajo de cualquier película de bajo presupuesto. Los sobresaltos, las expresiones faciales, los movimientos y demás están hechos al tuntún, sin demasiado esmero, y lo mismo daría que estuvieran en una morgue a las tres de la mañana con un asesino por los pasillos que en un parque lleno de columpios y palomas a las tres de la tarde.

Y para terminar, os comento que aunque las localizaciones son medianamente logradas (me refiero a las salas de preparación de cadáveres y demás) el resto de salas parecen más habitaciones de una casa que otra cosa, lo que le resta bastante credibilidad a la cinta (si es que con todo lo que ya os he contado le quedaba alguna, jaja).

El único punto a su favor (sí, algo bueno tenía la historia, mira tú por dónde) es que hacia el final de la peli el argumento da un giro ligeramente interesante y hace que quedemos intrigados un poco hasta que se llegue al final de la película, que por otra parte aunque curioso, no es nada del otro mundo y ya se ha visto en unas cuantas pelis, por lo que no tiene mucho mérito.

Así las cosas, por todo lo anteriormente descrito sólo puedo decir que es uno de los mayores bodrios que he visto, y que por tanto no recomiendo de ninguna manera, por muy aburridos que estéis. Pobres de aquellos que se gasten un solo euro en alquilar o comprar la película…

Y sí, me podríais decir que entonces cómo es que yo la vi entera… No os preocupéis, yo aún me lo estoy preguntando jaja.


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