Hoy os quiero hablar de una peli que se llama ‘Monstruoso (Cloverfield)’.
La historia que se nos cuenta trata de unos chicos que organizan una fiesta en un pisito en pleno Manhattan para despedir a uno de los amigos, que se va a trabajar a Japón. En esa fiesta, a la que están invitados muchos jóvenes, el mejor amigo de nuestro protagonista será el encargado de grabar con una cámara cada uno de los detalles de la misma con el objeto de que se lleve esa cinta de recuerdo al país del sol naciente.
Así las cosas, de repente se produce lo que en apariencia es un terremoto… Algo que muy pronto será desmentido, y en concreto cuando se percaten de que algo monstruoso está provocando el caos y la destrucción por toda la ciudad. Comienza así una lucha a la desesperada por salir de allí con vida… y junto con los seres queridos a poder ser.
Y ya no os cuento más para no estropear la cosa.
La película es a todas luces la típica peli americana de adolescentes, que en este caso se las verán y desearán intentando escapar de la peor de sus pesadillas. Nadie sabe nada aparte de que todo está siendo destruido y que la gente está muriendo, por lo que la única opción válida es salir corriendo e intentar salvarse. Pero como no podía ser de otra manera, los sentimientos también tendrán mucho que ver, sellando el destino de algunos de nuestros protagonistas.
El trabajo de los actores no está nada mal. Ninguno es conocido, pero todos tienen en común que saben moverse ante la cámara y que ofrecen un cierto grado de realismo que en una peli de este tipo es difícil de encontrar, y aunque no tienen actuaciones estelares dignas de Oscar (porque tampoco es que sus papeles cargados de tópicos den para mucho más) la verdad es que no están nada mal.
El apartado de efectos especiales se merece una mención especial. En una peli de catástrofes es inevitable que estén a la orden del día, y aquí no podía ser menos. Nos encontramos edificios derruidos, monumentos arrasados, caos y destrucción por todas partes, así como unos monstruos malos malísimos que son capaces de hacer bastante daño en menos de lo que podemos creer. Y todo ello está convenientemente pasado por ordenador para que quede un realismo sorprendente que desde luego es de lo mejor que veremos en la película.
Con respecto a la trama, si bien en un principio se hace un poco lenta, ya que lo que vamos viendo no es más que los pormenores de la fiesta de despedida, una vez que el monstruo comienza a hacer de las suyas es como si se pusiera toda la carne en el asador. Y es que a partir de este momento se pone en marcha todo el dinamismo posible: la acción se vuelve muy intensa, los sucesos son muy numerosos, se apelotonan y luchan por salir en pantalla, de modo que no hay un instante de pausa y esto hace que con el paso de los minutos vayamos llegando a una situación de cansancio, puesto que no hay ni un momento de sosiego que nos permita respirar.
A pesar de todo ello, lo curioso es que la peli no llega a durar ni una hora y cuarto, bastante menos de lo que dura la mayoría de largometrajes, pero dado que se vive con gran intensidad no se hace en modo alguno corta.
Una última curiosidad que quisiera comentar es el hecho de que toda la película se está viendo desde la perspectiva del cámara, ya que lo que estamos observando en todo momento es la grabación que el chico hizo aquel día. Habría que darle algún premio porque desde luego no pierde detalle importante alguno, jeje.
Desde mi punto de vista se trata de una peli entretenida, estupenda para pasar un rato sin buscar más que un poco de entretenimiento, que a veces disgusta debido a los movimientos de la cámara (lo cual llegado un punto puede exasperar, como sucede con la conocida ‘Rec’) y que no tiene apenas elementos de terror, porque aunque hay un monstruo y está arrasando la ciudad la verdad es que no nos implicamos demasiado con los protagonistas, con lo que poco importa lo que les vaya a pasar (y esto, la verdad, es una pena).
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